Cuando te han fallado una y otra vez es difícil volver a confiar. Cada vez nos hacemos la misma pregunta ¿por qué no volverían a fallarnos?

 Siempre esperamos que nos digan la verdad porque queremos confiar en los demás. una de las cosas que llegan a lastimar más es la decepción por no saber en quien podremos confiar. 

 Nos preocupamos mucho en no fallarle a los demás y por no defraudar la confianza que nos dieron y ellos no defrauden la nuestra, pero ¿eso es lo que en realidad importa? No queremos que la gente que amamos nos falle y no queremos fallarle a ellas.. ¿verdad?

Nadie quiere que los seres que más queremos nos fallen, sea un hermano, un padre una amiga, un novio. ¿cómo soportar algo así?. Pero el miedo más grande no es el que nos fallen , es fallarnos a nosotros mismos.